Visita del Papa Francisco a Ecuador, Bolivia y Paraguay

Se cumplen 2 años de la Visita del Papa Francisco a Ecuador, Bolivia y Paraguay. En este entonces, realizamos una cobertura especial de la llegada del Pontífice Francisco a Sur América desde el punto de vista aeronáutico y toda la logística alrededor de su tan mediática visita.

Pasaron algo más de 30 años desde la última vez que un Papa visitó Ecuador, esa vez fue Juan Pablo II llegando en 1985 también a Venezuela, Perú y Trinidad y Tobago. En esta reciente oportunidad Ecuador repitió visita y se sumó Bolivia y Paraguay como otros países honrados con recibir al “Primer Papa Sudamericano”.

Recordemos la historia

Juan Pablo II inició su visita de 1985 a Sudamérica en Venezuela el 26 de enero procedente de Roma. A su llegada inmediatamente se transportó en un DC-10-30 de la extinta Viasa YV-138C capitaneado por Rogelio Cortez. Este DC-10 lo trasladó entre Maiquetía y Maracaibo. Posteriormente Aeropostal lo transportaría en un DC-9 matrícula YV-24C entre Maracaibo-Mérida-Maiquetía/Maiquetía-Ciudad Guayana-Maiquetía.

Era el día martes 29 de enero de 1985 a las 17:56PM cuando Juan Pablo II aterrizaba en el ahora antiguo Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre de Quito en un DC-10 matrícula I-DYNC y bautizado como “Luigi Pirandello” de Alitalia, aerolínea oficial y que siempre ha sido la encargada de transportar al Papa desde Italia hacia el resto del mundo. Procedente de Venezuela se posó en la plataforma militar del Mariscal Sucre para realizar discursos de bienvenida y además realizar las visitas protocolares del caso. Posteriormente se trasladó a las ciudades de Latacunga, Cuenca y Guayaquil, siempre a cargo del transportador oficial local de esa ocasión, la extinta SAN – Servicios Aéreos Nacionales, la cual en un Boeing 727-100 HC-BIB “Ciudad de Cuenca” transportó desde Quito al Pontífice hacia dichas ciudades. El avión contaba con un interior refaccionado especialmente para la visita del Papa, con asientos especiales VIP y una “primera clase” acomodada a medida según requerimientos técnicos del Vaticano.

La visita a Ecuador terminaría el 1 de febrero del mismo año en Guayaquil, cuando a las 12 del medio día Juan Pablo II continuó su viaje hacia el hermano país de Perú, donde en Lima seguiría con su visita, esta vez nuevamente a bordo del DC-10 de Alitalia. Durante su visita en Perú visitó 8 ciudades a las cuales fue transportado en un Boeing 727 de la mundialmente famosa y ahora desaparecida Aeroperú, entre ciudades como Arequipa, Piura, Cuzco y otras.

De Roma a Quito

El periplo de Francisco hacia Sudamérica, su primera visita a esta región del planeta, inició a las 9 de la mañana hora local desde Roma – Fiumicino a bordo de la aerolínea oficial del Vaticano, Alitalia. En esta ocasión, a diferencia de otros viajes del Papa, fue realizado en un Airbus A330 en vez del regular Boeing 777 que ha transportado al Pontífice en otras oportunidades. Posiblemente por la complejidad operativa en aeropuertos de altura, como lo es Quito o incluso para que el viaje sea más económico y de menor comitiva. El avión elegido para esta ocasión fue el Airbus A330-202 EI-EJL, con solo 3 años de operaciones para la aerolínea de bandera italiana.

Tras 12 horas y 30 minutos de vuelo directo desde Roma aterrizó en el Mariscal Sucre de Quito, dejando atrás los 30 años que tuvo que esperar el pueblo católico ecuatoriano para tener en sus tierras nuevamente a un Papa. Tras un breve patrón de espera sobre el VOR Norte para llegar a la altitud recomendada para el inicio del procedimiento de aproximación el vuelo con número AZ4000 descendió hacia la capital de los ecuatorianos y minutos después fue visto alineado a la pista y listo para aterrizar. Desde la torre de control se concedió la autorización y el Papa Francisco se encontraba ya en tierras ecuatorianas, en plena mitad del mundo.

El avión ocupó los 4 100 metros de pista para abandonar la misma, tiempo en el cual los pilotos aprovecharon para asomar por las ventanas de la cabina, en un gesto protocolar muy agradable, las banderas de Ecuador y del Vaticano, Francisco estaba a minutos de pisar tierras ecuatorianas por primera vez, como Papa. Siguiendo un “Follow Me car” el avión se dirigió hacia la plataforma de aviación general y protocolos, las cual había sido adaptada y probada previamente con el A330 de Tame, para garantizar que el tamaño y servicios en tierra funcionaran a la perfección, era la primera vez que un avión tan grande ocupada dicha plataforma. Tame durante la visita, fue la aerolínea oficial de transportar a la comitiva, invitados y prensa internacional entre Quito y Guayaquil, y también ofrecer transporte a personalidades religiosas desde países vecinos a los que vuela la aerolínea.

Los controles y seguridad previa a su llegada habían sido extremados, y el acceso al aeropuerto, el cual cerró sus operaciones por 2 horas, era restringido, solo pasajeros eran permitidos llegar por la única vía habilitada, incluso como medio de comunicación se nos complicó llegar hasta la terminal aérea. Dadas estas restricciones la cantidad de gente que esperaba al Papa no era mayor, pero el interés por parte del personal aeroportuario era alto y aprovechando las 2 horas libres por el cierre del aeropuerto fueron excusa para acercarse lo más posible al avión y tomar fotografías.

Raudamente el avión se estacionó sentido sur norte de la pista, se instalaron las escaleras de descenso de pasajeros, y pocos minutos después el Papa se encontraba ya en tierras ecuatorianas.

Al día siguiente, lunes 6 de julio a las 9 AM, el Papa Francisco se trasladó a Guayaquil, a diferencia de la visita anterior que realizó vuelos locales en SAN, lo hizo a bordo del Airbus A330 de Alitalia con número de vuelo AZ4002. Tras 25 minutos de vuelo, la base aérea Simón Bolívar recibía por segunda vez en su historia a tan importante eminencia. El mismo día a las 17 horas el regreso se concretó a Quito, desde donde el 8 de julio se trasladaría a Bolivia.

De Quito a La Paz

El 8 de julio estaba previsto el viaje de Quito a La Paz. Dada la complejidad de la operación en el Aeropuerto Internacional El Alto, el cual requiere de certificación especial por operación sobre los 13 mil pies (Altura aeropuerto: 13.314 pies) e incluso operación de aterrizaje y despegue con máscara de oxígeno en todo momento. Con eso en cuenta fue necesario contar con un operador local para trasladar con seguridad al Pontífice entre estos aeropuertos. Es así que BoA – Boliviana de Aviación, se convirtió en la aerolínea oficial del traslado del Papa entre Quito, La Paz y Santa Cruz, en otras visitas de un Papa a Bolivia era la extinta Loyd Aéreo Boliviano la aerolínea encargada de esta operación y privilegio.

BoA aterrizó por primera vez en Quito el mismo 8 de julio, trayendo su aeronave más nueva, el Boeing 737-700NG CP-2923 que voló como Boliviana Pastoral 900. La salida estaba prevista para las 12 del mediodía, pero el vuelo se retrasó 1 hora. Mientras el vuelo de BoA transportaba al Papa hacia La Paz, el Airbus 330 de Alitalia viajó directo a Santa Cruz, aterrizando en el Aeropuerto Internacional Viru Viru, donde esperaría al Papa para continuar hacia Paraguay.

Tras 3 horas, el vuelo Papal ingresó al espacio aéreo de Bolivia y fue escoltado por 2 aviones de la Fuerza Aérea T-33. Los escoltas siguieron el vuelo hasta que el avión aterrizó a salvo y sin novedad en tierras bolivianas. Tras seguir los protocolos establecidos en La Paz, el vuelo continuó hacia Santa Cruz a las 20 horas locales, donde su visita terminaría el 10 de julio a las 12:45 del mediodía. El periplo continuó nuevamente a bordo del avión de Alitalia hacia Asunción.

De Santa Cruz a Asunción

Con una duración de 2 horas con 15 minutos llegó a Paraguay el Papa Francisco a bordo de “su avión” el A330. A tiempo aterrizó en Asunción en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirosi donde sería su última parada dentro de su primera visita a la región. Su visita en este último país Latinoamericano duró hasta el domingo 12 de julio, manteniéndose siempre en la capital paraguaya. Durante la visita de Juan Pablo II a tierras paraguayas este lo realizó en un histórico Boeing 707 de la desaparecida y recordada LAP

A las 19 horas locales, el Airbus 330 emprendió su último tramo, esta vez con número de vuelo AZ4001 directo hacia Roma, esta vez al Aeropuerto Internacional Ciampino–G. B. Pastine o más conocido como Aeropuerto Roma Ciampino. Tras algo más de 13 horas de vuelo el Papa se encontraba nuevamente en suelo italiano poniendo fin a 9 días de viaje que implicaron una importante logística aérea y altos parámetros de seguridad en toda su operación involucrada, que con el respaldo de las autoridades de cada país fue cumplido a cabalidad, dejando muy en alto a toda la región.

Todo el viaje Papal requirió más de 3 500 personas aeronáuticas involucradas directa e indirectamente entre los 4 países participantes, incluido Italia. Entre controladores, pilotos, personal de tierra y otros, sumaron más de 82 000 horas hombre para llevar a cabo todos los protocolos y actividades encomendadas para la visita del Papa Francisco, el cual voló aproximadamente algo más de 15 000 millas entre Europa y Suramérica pasando por 6 aeropuertos diferentes y volando tanto en Airbus como en Boeing.

Finalizamos con un agradecimiento especial a Quiport S.A por permitirnos acceder a plataforma para tomar fotografías de cerca al avión de Alitalia, al Capitán Enrique Burgos por las fotos históricas de 1985, a Dusan Mercado, David Cari y Spotting And Aviation de Bolivia por las fotos en su país y a Juan Carlos Andrada www.aeronauticapy.com por la colaboración desde Paraguay.

Datos técnicos Alitalia

Datos técnicos BoA