Repasamos en esta entrega los mitos y verdades sobre volar con la nueva normalidad durante la pandemia y los nuevos protocolos.
Los vuelos siguen en aumento y con ello la preocupación de aquellas personas que quieren o necesitan volar surgen, y así se generan algunos mitos sobre ser pasajero en esta nueva normalidad, pero aquí te indicaré las verdades sobre estas dudas.
Uso de mascarillas, distanciamiento en filas de los aeropuertos y desinfección de manos son los protocolos básicos que como pasajeros debemos tener siempre en cuenta, no solo en los aviones, sino también en nuestra vida diaria, del resto de encarga la industria aérea.
Mitos y verdades de volar en la nueva normalidad
Mito 1: La cabina de un avión debe ser muy contagiosa.
VERDAD: Al contrario, uno de los ambientes más seguros y estériles es la cabina de los aviones, donde el aire circula de manera vertical y se renueva cada 3 minutos gracias al sistema de recirculación de aire y filtros HEPA (High-Efficiency-Particulate Arrestors), que remueven el 99.9% de las partículas, virus y bacterias.
Mito 2: Hacer vuelos largos, con mucha gente, dentro de un avión debe ser un foco infeccioso.
VERDAD: No. Gracias a los filtros HEPA, que captan las partículas con una alta eficacia y que logran que todo el aire que ingrese a la cabina se renueva cada tres minutos por aire limpio del exterior, sumado al complemento de medidas como uso permanente de mascarillas durante el proceso completo de viaje; se resuelve esta inquietud para vuelos de corta o larga distancia. Además, es importante destacar que para los vuelos que tienen varias conexiones, y cada vez que el avión toca tierra, se ejecutan los procedimientos de limpieza y desinfección profunda, antes del embarque de nuevos pasajeros y luego de su desembarque.
Mito 3: Las aerolíneas dicen, por fines comerciales, que bastan los filtros HEPA para evitar contagios en la cabina del avión.
VERDAD: La teoría de la eficacia de los filtros HEPA no solo tiene el respaldo del fabricante de los aviones, como ejemplo, Airbus; sino también de la Oficina de Ambiente, Salud y Seguridad de Estados Unidos, quien indica que son capaces de retener hasta en un 99.9% impurezas en el aire que pasa a través de ellos, en tamaños de hasta 0.3 micrones, haciéndolos altamente eficientes. Estos filtros son elaborados de varias capas de fibras artificiales distribuidas aleatoriamente dentro del mismo, lo que hace permite al aire recirculado, tener un alto grado de pureza.
Mito 4: En los aviones no hay distanciamiento social de dos metros, y los usuarios se sientan uno al lado del otro, eso es peligroso.
VERDAD: Debido a la eficacia de los sistemas HEPA, la misma IATA y el fabricante de aviones Airbus, no recomiendan por ejemplo dejar libre el asiento del medio como medida de distanciamiento, porque se ha demostrado que gracias a que las cabinas de avión permanecen estériles debido a la circulación vertical cada 3 minutos del aire gracias al sistema de aire y filtros HEPA, que remueven el 99.9% de las partículas, virus y bacterias. Además, debemos recordar que arriba del avión los tripulantes de cabina son quienes se encargan de mantener los procesos de protocolo de seguridad y de ver porque el distanciamiento al embarcar o desembarcar los pasajeros, se cumpla. Adicional, se recomienda a bordo a los pasajeros acatar estas disposiciones y evitar desplegarse de manera innecesaria por la cabina, desinfectarse las manos de forma periódica y portar obligatoriamente la mascarilla.
Mito 5: Los filtros HEPA me van a librar de contagiarme en un avión
VERDAD: Si bien cuando el aire dentro de los aviones es considerado seguro gracias a estos filtros y a la función de purificación del aire dentro de las cabinas que contrarresta agentes contaminantes, es fundamental que los pasajeros respeten las otras medidas de seguridad que van de la mano y no pueden ser pasadas por alto. Por ejemplo, la aerolínea LATAM ha implementado un protocolo a bordo de aviones que consiste en: mantener activos los procedimientos de desinfección de aviones antes y después de cada vuelo, se mantiene procedimientos de catering simplificados, se limita la circulación de pasajeros dentro del avión y, además de mantener indicadores efectivos como la asepsia permanente de manos, la dotación de alcohol gel se hace respetar la obligatoriedad de portar mascarilla durante todo el vuelo.
Mito 6: Si un pasajero estornuda en la cabina del avión nos podemos contagiar las personas que estamos alrededor
VERDAD: La efectividad de los filtros sirven para actuar en estos casos y purificar el aire de la cabina. Asimismo, recordemos que en estos casos el uso de mascarilla también nos protege de agentes infecciosos. La norma es la misma arriba del avión, debes tener la mascarilla correctamente colocada; si estornudas o toses, debes cubrirte la boca y nariz (con el brazo, pañuelo,etc). Después de sonarse la nariz, toser, estornudar, tocar superficies, antes y después de comer o después de ir al baño, es importante lavarse las manos durante al menos 20 segundos con agua y jabón.
Mito 7: Debo esperar un año más para viajar en avión y estar tranquilo
VERDAD: No debería retrasar más su viaje si lo que le preocupa es la seguridad de la cabina del avión. Las aerolíneas han tomado todas las medidas de seguridad e higiene recomendadas por la OMS, así como las de la industria a través de la IATA y, adicional, los aviones no han dejado de volar y se ha seguido transportando a millones de personas siguientes todos los protocolos de bioseguridad. Recordemos que el funcionamiento propio de los filtros HEPA en la cabina del avión permite la filtración de aire y ese es el factor principal sumado a los protocolos de sanitización a los que los aviones se someten estrictamente antes y después de cada vuelo, son una garantía de seguridad y calidad.
Mito 8: Las personas que falsifican las pruebas para volar son un riesgo y pueden infectar a todos los pasajeros del avión
VERDAD: Durante la pandemia se han trasladado miles de personas alrededor del mundo, en vuelos llenos, en distancias cortas y largas; con ello se ha evidenciado y comprobado la eficiencia de los protocolos y medidas de seguridad. Cada vez son más personas las que se trasladan en avión y van retomando la confianza en volar.
¿Te animas a volar?